Este artículo es una traducción del original en inglés de Luke Burrage que puedes leer aquí.
Hacer buenas fotos de malabaristas es fácil… Siempre y cuando actúen en exteriores con luz natural; la escena será luminosa, el malabarista tendrá un aspecto genial, el fondo con otros malabaristas resultará interesante y el artista intentará el mismo truco una y otra vez hasta que le captures en la posición perfecta.
Ahora, hacer fotos de malabaristas en el escenario es un asunto mucho más complicado. Para empezar, suele estar bastante oscuro, hay demasiado movimiento, el fondo es una aburrida cortina negra y el malabarista por lo general sólo hace una vez cada truco y pasa a otro nuevo.
Había un momento en el que de verdad odiaba hacer fotos de malabares en el escenario. Era realmente frustrante que salieran borrosas y aburridas. Pero después aprendí unos cuantos trucos y de repente me parecía divertidísimo hacerlas. ¿Por qué? ¡Las fotos salían bien! Entonces mi muevo problema es que cuando yo actuaba, nadie me sacaba buenas fotos. Para resolver este problema, aquí tenéis mi guía en profundidad de cómo hacer fotos de Luke cuando está sobre el escenario.
Primero: Qué no hacer
¡No uses un trípode! Los trípodes ayudan a mantener la cámara fija, lo que sería genial si el sujeto estuviera también inmóvil. ¡Pero los malabaristas se mueven! ¡Los malabares se mueven! Si el movimiento de los malabares es suficientemente rápido como para que salgan borrosos, mantener la cámara fija no te ayudará en absoluto.
¡No uses flash! Es una idea realmente mala.
¡No te sientes! A no ser que tu asiento esté en la posición perfecta, cada una de tus fotos está en peligro. Y no existe una posición perfecta para todo el espectáculo. Simplemente no hay ningún lugar concreto que funcione para todos los malabaristas en toda una gala de una convención. Trataremos el posicionamiento más tarde.
Segundo: Equipamiento
Lightroom de Adobe o Aperture de Apple
Como decía en un post anterior, el complemento fotográfico más importante (después de una correa de muñeca para la cámara) es el software de retoque o post-procesado, Lightroom de Adobe o Aperture de Apple. Escribí lo siguiente “usando las opciones de edición lograrás mejores resultados que con las imágenes sacadas directamente de la cámara. Obviamente, tiro muchas fotos sabiendo que luego las editaré en Lightroom. Nada drástico, pero sé que puedo confiar en ajustar algunas partes de la imagen más tarde”.
La parte más importante en relación a este post es la reducción de ruido. Para ser claros: Una imagen con ruido es mejor que una imagen borrosa.
Lightroom y Aperture son muy muy buenos eliminando el ruido del sensor de la cámara, pero ningún software puede afinar la imagen borrosa de un malabarista.
Aquí tenéis un ejemplo de reducción de ruido de Lightroom de la web de Adobe:
Como querrás tener una velocidad de obturación suficientemente rápida para congelar una maza en movimiento, la apertura (f) ha de ser lo más grande que se pueda (más sobre esto después) y el sensor ha de poder capturar toda la luz posible (ISO alta). Todo esto genera ruido; y para solucionar el ruido más tarde, podemos confiar en Lightroom o Aperture.
Una cámara DSLR
Casi cualquier DSLR va a ser suficientemente buena. Yo uso una Canon 60D, pero he tomado muchas buenas fotos con la 500D. Una Nikon similar también bastará.
Un teleobjetivo con zoom
Yo utilizo un objetivo Canon EF 70-300mm f/4-5.6 IS. El “IS” significa “Estabilización de imagen”. No quiero extenderme mucho en esto, pero más o menos añade un paso extra en la capacidad para trabajar con poca luz. Y esto me permite usar una velocidad de obturación ligeramente más rápida (medida en segundos) de lo que me permitiría un objetivo sin IS, sin estabilizador de imagen.
Este objetivo cuesta unos 500 €, y puedes encontrar objetivos muuucho mejores si estás dispuesto a pagar muuucho más dinero. Yo no lo estoy.
En cualquier caso, el angular de 70 mm es suficientemente ancho para que el malabarista quepa en la foto, siempre y cuando no estés demasiado cerca (más sobre la posición después). El final del zoom de 300 mm es suficientemente bueno para hacer una foto cercana de un patrón o de la cara del malabarista.
Tarjetas SD grandes
Ten tarjetas SD de gran capacidad. Vas a crear ficheros de imágenes enormes y no vas a tener tiempo de revisarlos y borrarlos. Después podrás hacerlo (o tampoco), pero seguro que no durante el show.
Tercero: Parámetros de la cámara
Ten en cuenta que una buena foto depende de cuánta luz entra en el sensor. Puedes hacer que entre más luz así:
- Reduciendo la velocidad de obturación – lo que también hará que las cosas estén borrosas.
- Aumentando la ISO – que creará más ruido, pero lo podremos arreglar después.
- Aumentando la apertura f – lo que es bueno para desenfocar el fondo.
Así que teniendo estos tres procesos en mente, los separaré por pasos. Antes de hacer ninguna foto:
- Pon el formato de imagen en RAW. Esto es SÚPER importante, ya que las imágenes en RAW tienen todos los datos del sensor que necesitas para quitar el ruido después, y guardan mucha más información que un JPG, lo que necesitaremos para el post-procesamiento.
- Pon la ISO todo lo alta que puedas. ¿Ruido? No te preocupes, lo arreglaremos después. Además, por lo general tus fotos no se van a imprimir en posters sino que se van a compartir online, en Facebook y en páginas de malabaristas. Nadie va a hacer zoom para ver los píxeles.
- Pon la cámara en modo TV. Lo más importante es que no haya nada borroso por el movimiento, así que queremos controlar la velocidad de obturación por encima de todo.
- Coloca la velocidad de obturación en 1/160. Según mi prolongada experiencia, esto congelará la mayoría de malabares en el aire. Los malabares en las manos se mantendrán borrosos, así como los diábolos en aceleración o los malabaristas haciendo piruetas (los humanos nos podemos mover más rápido que los malabares en el aire).
- Pon la compensación de exposición (ev) en -1. Esto significa que es menos probable que las zonas blancas o brillantes queden sobre expuestas. Además, la información de luz que se pierda será la de las cosas oscuras. En este caso las cosas oscuras incluyen el telón negro de detrás, los espacios vacíos a los lados del escenario, el soporte de la iluminación, etc. En otras palabras: lo que no es importante. De todos modos gran parte de las veces la escena estará tan oscura que la cámara abrirá la apertura todo lo posible, así que el -1 no tendrá ningún efecto añadido.
- Pon el modo de disparo en continuo, pero continuo-lento. No hay necesidad de sacar 9 o 12 fotos por segundo. Tres por segundo será suficiente.
- Pon el autofocus en AIFocus. No estoy seguro de porqué, pero parece que da los mejores resultados para los malabares en escenario.
- Pon la medición en Medición Evaluativa. La medición puntual es demasiado precisa y un malabarista no estará siempre en tu punto de enfoque. La medición parcial y centrada no siempre funciona porque el artista ni está siempre en el centro ni es el objeto más brillante de la foto.
Probablemente Nikon tenga otros nombres para estos mismos ajustes.
¡Esta es la configuración! Pero no lo dejemos ahí.
Por lo general estará oscuro, así que el modo TV abre la apertura todo lo que pueda. Esto es perfecto, porque lo que quiero es que los malabaristas estén enfocados y el resto fuera de foco.
¿Qué sucede si el escenario se vuelve tan luminoso que la apertura comienza a cerrarse? No quiero que el número F suba de 8 o 9. En este caso deslizo el dedo y paso la velocidad de obturación a 150 o 320. El malabarista estará aún más perfilado en términos de borrosidad por el movimiento, y el fondo seguirá desenfocado.
Si hay dos malabaristas sobre el escenario, y quiero que ambos estén enfocados, entonces tengo que reducir la apertura. A veces cambio a modo AV para esto, pero reducir la velocidad de obturación funciona igual en el modo TV, y mecánicamente los resultados son los mismos. Sólo tengo que tener en mente que dos malabaristas no pueden moverse tan rápido.
Si la luz mejora durante un tiempo prolongado, dejo la velocidad de obturación en 250 y uso una ISO más baja para forzar a que la apertura se abra. Esto mejora ligeramente la calidad de las fotos.
¿Y si se pone más oscuro? Bien, entonces estoy bastante jodido. Para evitar este problema intento lo siguiente:
- Organizo el show yo mismo y le digo al técnico de iluminación que deje el escenario lo más iluminado posible para que todo el mundo vea.
- Evito hacer fotos de malabaristas franceses sobre el escenario. Los malabaristas franceses intentan ser “artísticos” y desafortunadamente confunden “oscuro” por “artístico”. De vez en cuando paso por actos de Open Stage franceses y vuelvo con nada más que algunas borrosas. Sin embargo, los alemanes y japoneses en el mismo Open Stage tendrán fotos brillantes y coloridas de sus espectáculos.
Yo suelo utilizar una combinación de las dos técnicas de enfoque, cambiar los puntos de enfoque de la cámara y enfocar y recomponer; para tener fotos más enfocadas. Recuerda enfocar a la cara del malabarista, no a los malabares. Primeramente porque la cara es lo más importante de la foto. Y lo segundo porque la cara suele moverse menos que los malabares, así que el autofocus lo tendrá muuucho más fácil para acertar.
Cuarto: Colocación
Por el amor de Dios, no te sientes en la fila frontal para hacer fotos. Es un mal sitio para colocarte. De verdad. Te parecerá que es un sitio bueno, pero no sabes lo suficiente.
¡El malabarista es lo más importante de la foto! No el soporte de las luces, no el telón, no el escenario… el malabarista. Lo explicaré con esquemas:
Todo depende de los ángulos. Si usas una lente angular y estás cerca del malabarista la foto se llenará de todo tipo de elementos indeseados que distraen.
Aquí tenéis una foto donde intencionadamente incluí demasiado fondo:
A ahora, en el mismo espectáculo tomada unos segundos después en la que quité todo el fondo posible:
En ambas fotos, Wes (el artista de la foto) ocupa más o menos el mismo espacio, ambas están tomadas con un ángulo “interesante”. Pero en una el centro de atención es Wes; y en la otra es Wes en un escenario con luces sobre él. Si te quedas frente al escenario y usas el angular para que entre el malabarista, entonces nunca no tendrás fotos que se centren en el recinto y no en el artista.
Otra razón para excluir los focos es que una bola de malabares y un foco de escenario son ambos objetos redondos, y se pueden llegar a confundir en alguna foto. Aquí tenéis un ejemplo no demasiado bueno de esto, de nuevo con Wes (fíjate en las luces):
En este caso yo estaba sentado a bastante distancia del escenario y no me moví de allí (estaba más interesado en ver el show con mi novia que en hacer fotos); no pude quitar las luces de la imagen.
Si te alejas más del malabarista y utilizas un objetivo de 70-200 mm o 70-300 mm para encuadrar al mismo malabarista, la cantidad de foto que queda en la foto se reduce significativamente.
En los conciertos de rock la iluminación y el fondo son a veces parte del show y añaden atmósfera sin molestar la acción. Yo hago fotos angulares en los espectáculos de malabares, pero normalmente es para incluir a la audiencia; algo que aporte a la imagen sin complicarla. Por ejemplo, la razón para usar el angular para tomar esta foto de Wes es que quería estar preparado para el final de la actuación. Sabía que cuando llegaran los aplausos, haría algo acrobático.
Otra razón por la que no deberías estar frente al escenario es porque frecuentemente ese ángulo le cortará los pies al malabarista. Hay una línea por debajo de cual no quiero bajar, y una foto como ésta está justo al borde de la línea (fíjate en los pies):
Puedes evitar cortales los pies si te levantas… pero si estás en frente entonces estás tapando la vista de todos, estúpido.
Sigamos. Otra razón por la que no quieres estar en frente del escenario es porque entonces estás mirando hacia arriba al malabarista. Esto funciona a veces, pero… ¿Quieres mostrar en todas las fotos qué es lo que hay en la nariz del malabarista? No. Saqué esta foto desde este ángulo porque estaba realmente cerca de mí, y tenía un aspecto gracioso:
Más adelante saqué esta foto del mismo tipo. Seguía teniendo un look divertido, pero puedes ver que el ángulo es mejor para no ir mirando las narices a nadie.
Los malabaristas miran hacia arriba. Mucho. Cuanto más puedas hacer para minimizar las veces que sacas la barbilla desde abajo, mejor ¡Sepárate del escenario!
Así que si no estoy en frente, ¿dónde suelo estar? Me coloco a los lados, y bastante lejos del escenario. Tan lejos del lateral como puedo. Si necesito acercarme, puedo moverme hacia delante o simplemente hacer zoom.
Algunas razones:
- Los malabaristas suelen mirar hacia la audiencia cuando malabarean, y miran hacia arriba. Así, en lugar de sacar la parte de debajo de la barbilla en la foto, saco su perfil completo o medio perfil. Si se giran puedo sacarles de frente. Si se giran hacia el otro lado, en dirección contraria a la cámara, puedo sacar una interesante truco del truco por encima del hombro. Si me hubiera quedado en el frontal nunca podría haber sacado ninguna desde detrás.
- Si hay dos malabaristas a la vez sobre el escenario, normalmente estarán colocado lado a lado, no espalda con espalda. Si estoy en un lado, puedo encuadrarlos de manera más interesante de la que los espectadores ven. Mira la siguiente foto y compárala con la foto de las mismas malabaristas que puse arriba. En esa foto (tomada directamente frente al escenario) tuve que confiar en que se acercaran y se colocaran en una posición interesante. En esta foto (hecha desde un lado) pude moverme ligeramente para alinearlas en la foto a la distancia que quisiera:
- Si coloco una lente angular, puedo hacer que entre también toda la audiencia. Por ejemplo, así:
Y un ejemplo más extreme, esta foto fue hecha por Juliane desde el mismo escenario:
A veces la audiencia crea un fondo más interesante que cualquier cosa que esté al fondo del escenario. Al mostrar parte de la audiencia (si puedes lograr ese ángulo) la foto se convierte en un documento que muestra sin lugar a dudas que era un evento en directo, y no algo montado o preparado.
Esta foto se hizo con teleobjetivo, pero la pasarela de desfiles de moda hizo que pudiera colocarme por detrás de la acción:
- Incluso si no puedes sacar a la audiencia en la toma, los laterales del escenario suelen ser también un fondo más interesante para la acción que un telón negro. Esto contradice mi consejo de no incluir el soporte de la iluminación y darle toda la atención al malabarista, pero a veces algo en el fondo es mejor que nada. En la convención de Malabares de Berlín no tuve ninguna opción con el show de trapecio, al tener un ángulo extraño, el fondo era completamente negro:
Las acróbatas, por otra parte, actuaban defrente. Así que pude colocarme de manera que quedaran encuadrados con los soportes de los focos del lateral del escenario.
¿Qué foto es mejor? Eso depende de cada uno, pero yo elegí la segunda como portada del álbum de Facebook de ese espectáculo. Mientras que el fondo esté complementando la acción y no estorbando, es posible que te dé algo más interesante que un fondo negro.
Al final intento lograr un equilibrio y moverme de un lado a otro para aportar variedad, especialmente si mi función es la de hacer fotos (y no estoy en el show, o simplemente sentado en mi butaca viéndolo). A veces, estar justo en el frente es la mejor posición para una toma angular del final del espectáculo:
Pero eso no significa que me vayáis a encontrar detrás de las mesas de luces y sonido buscando una composición interesante:
O en el otro lado del escenario, sacando una foto más cercana donde se puede ver cómo se produce la magia:
Quinto: Edición
Una vez que tengas todas las fotos del espectáculo, llega la hora del paso crucial: la edición. Y con esto no me refiero a la post-producción o a cambiar cada una de las fotos. Editar es eliminar fotos hasta tener un número razonable de éstas.
Cuando importo mis fotos a Lightroom le doy a todas 1 estrella automáticamente. Luego miro cada una y le doy 3 estrellas a las que creo que son técnicamente correctas e interesantes de ver. Luego vuelvo a revisar las fotos de 3 estrellas y quito todas las que sean posibles.
Veamos algunos números:
- En la EJC de 2013 hice más de 2.000 fotos.
- Cuando empecé a hacer fotos, me conformaba con que 1 de cada 10 fotos fuera técnicamente correcta y que 1 de cada esas 10 mereciera la pena mirarlas. Partiendo de 2.000 y compartiendo 1 de cada 100, me deja con 20 fotos.
- Sin embargo, a medida que iba mejorando llegué un punto en el que 5 de cada 10 fotos eran técnicamente correctas, y después 9 de cada 10. Mejorando más aún, la mayoría de las fotos eran suficientemente atractivas.
Así que ahora, de 2.000 fotos, tranquilamente podría encontrar 1.000 que fueran técnicamente correctas y suficientemente buenas. Pero, solo son interesantes de forma aislada.
No importa si una de las fotos es buena si las siguientes cinco fotos son del mismo sujeto y desde el mismo ángulo, solo la primera de las 6 es interesante. Las cinco siguientes son correctas técnicamente, pero si las ves en orden son simplemente aburridas.
Así que, volviendo a la edición, una vez que tengo una carpeta llena de fotos de 3 estrellas no voy pasando las peores a dos estrellas, ya que las malas nunca habrían logrado pasar la primera criba. En su lugar lo que hago es eliminar las fotos duplicadas del siguiente sujeto.
Al final, paso a tener 200 de las 2.000 iniciales. Me quedé con 200 principalmente porque es el máximo número de fotos que se pueden añadir a un álbum de Facebook (o al menos lo era la última vez que lo comprobé). Seguramente podría reducir más el número y dejarlas en 100 fotos, pero ya que comparto todas mis fotos en alta resolución en beneficio de los artistas y malabaristas (para que puedan usarlas en sus webs o material promocional siempre que me atribuyan la creación), me gusta subir muchas fotos.
Si me limitara a solo 100 o incluso 50 fotos, parecería que soy fotógrafo incluso mejor de lo que aparento en mi álbum de Facebook. En lugar de coger las 10 mejores fotos de las 60 que saqué en las competiciones de monociclo de la EJC, me quedé solo con dos. Y serían las dos mejores.
De nuevo, lo que busco es el equilibrio. No hago fotos para demostrar lo buen fotógrafo que soy, sino para documentar la convención. Si redujese mucho más la selección, excluiría a gente y eventos que sí quiero compartir.
Una de las mejores cosas que puedes hacer cuando compartes fotos online es ser brutal en tu edición. Nunca saques dos fotos de la misma persona, desde el mismo ángulo, con el mismo encuadre y haciendo el mismo truco. Puede que ambas fotos sean «buenas», pero tú eres el único al que le importa haber hecho dos fotos buenas. Todo el mundo quiere ver las mejor de las dos fotos y pasar a la próxima. No quieren ver un registro en time-lapse de lo que viste en el show, quieren ver el momento más impactante visualmente de cada número y luego pasar al siguiente.
Ponte un límite bajo de fotos cuando empieces a editar, e intenta batir ese número. Comencé con 2.000 fotos y al final compartí 195.
Sexto: Post-procesado
Una vez que ya has pasado de un número grande de fotos a un número pequeño, es la hora de tocar las palancas, engranajes, tuercas y tornillos de Lightroom o Aperture.
La imagen en RAW tendrá un aspecto un poco apagado:
Lo primero que hago con todas las fotos de espectáculos de malabares (de hecho lo hago al importar, antes de editar), es intentar que estén menos apagadas. La configuración básica de importación que uso (en Lightroom 3) es:
- Aumentar el Brillo a “50″.
- Aumentar el Contraste a “25″.
- Aumentar los Negros a “5″.
- Activar la Redución de Ruidos. Pongo la Luminancia en «10» y el Color en «10».
Esto hace que el sujeto de la foto (el artista en el escenario) sobresalga un poco del fondo. ¿Y todo lo que queda oscuro en el fondo? Eso queda más oscuro y distrae menos. Los colores son más intensos y… bueno, está todo menos apagado.
Como decía, esto lo hago al importar, así que nunca veo la versión apagada. El nivel de ruido está perfecto en estas fotos, aun tomándolas con ISO 6400. Sé que es una ISO realmente alta, pero dejaré que Lightroom se ocupe.
A partir de aquí quería hacer algunos ajustes adicionales.
Primero, corté la foto ligeramente para eliminar el espacio negro sobrante alrededor del sujeto.
Después ajusté la exposición. ¿Te acuerdas cuando decía que barajaras la compensación de exposición de la cámara a -1? ¡Ahora la vuelvo a subir! En este caso la subí a +0,7 para recuperar el color y la luz que recuerdo que tenía el show en directo.
Tercero, añadí un poco de viñeteado para oscurecer un poco más en las esquinas, aunque en esta foto casi no se nota.
Este es todo el post-procesado que necesitaba esta foto. Aquí está la foto final y la original:
La mayoría de fotos solo necesitan 2 o 3 pasos; corto la foto a mi gusto, decido la exposición final, ajusto el balance de color, añado viñeteo, subo la saturación, etc. Como ya hago el proceso al importar las fotos, no tengo que empezar desde cero usando esta fórmula que funciona.
Para hacerlo aún más rápido, si tengo múltiples fotos con la misma iluminación, copio los ajustes de una foto a otros.
Pero quiero dejarlo claro otra vez. Cuando hago las fotos ya sé qué ajustes de post-producción haré en el futuro. Esto me permite hacer mejores fotos (léase, menos borrosas) en lugar de tener que preocuparme de hacer la foto perfecta en ese preciso momento.
Muy rara vez utilizo el post-procesado para intentar salvar una foto mala y hacerla buena; en su lugar, saco una buena foto sabiendo que lo que sale de la cámara es solo el primer paso. La foto sólo estará terminada una vez que la exporte de Lightroom.
Dicho esto, aquí está una foto mala que tomé hace poco:
«¡Ehh… eso no es una foto mala!». – ¿No? Ésta es la original:
La saqué desde mi asiento entre el público, así que no me pude mover a una posición mejor. El palo de la carpa atravesaba uno de los aros de Wes. Y Wes no había cogido aún su aro, así que estaba en un «momento» distinto al de Patrik y Tony, en la parte izquierda.
Recorté mucho la foto:
Pero entonces la mitad de la luz del escenario estaba fuera del encuadre y la otra mitad dentro. ¡Eso queda cutre! Utilicé la herramienta de eliminación de manchas para duplicar un poco de negro encima de esa luz izquierda solitaria Y mientras tenía la herramienta de «clonar» abierta y porque unos amigos estaban viéndome editar la foto, decidí copiar también algunos de los aros. ¿Por qué no? ¡Mi recuerdo de ese momento me dice que el escenario estaba completamente lleno de aros! ¡En las fotos de medio segundo antes de esta, los aros llenaban de verdad el escenario! Pero Tony y Patrik no estaban muy bien colocados. Añadir los aros es, en mi opinión, un paso divertido. Cuatro días después de publicarla, esa foto es la que más ha gustado en todo el álbum (foto final y original).
A veces quito luces o elementos del fondo que puedan distraer, pero no recuerdo haber añadido elementos antes. Esto es un ejemplo de cómo de extremo soy en el procesado de imagen…no muy extremo que digamos.
Una vez que he terminado todo el procesado, las reviso y las edito de nuevo. Si hay alguna foto que sigue siendo un poco sosa, le doy 2 estrellas y no pasa la criba final.
¡Eso es todo! Esto es lo que puedo compartir sobre cómo hacer mejores fotos de malabaristas sobre el escenario. Ahora, si yo estoy sobre el escenario y alguien con una cámara y un objetivo medio decentes me está haciendo fotos, ya no hay excusas para que las fotos sean una mierda.
Luke Burrage comenzó su andadura en los malabares a los 11 años y a los 16 años decidió estudiar artes escénicas y prepararse para pasar su vida sobre el escenario. En 2002 logró su primer récord mundial, logrando otros durante su carrera. Desde 2003 es malabarista profesional y ha actuado ante cientos de personas en eventos de malabares, teatros de variedades, espectáculos de calle y en cruceros de gran prestigio como el Queen Mary 2. Luke ganó en 2004 el premio del público de la Asociación Internacional de Malabaristas, ha presentado varias galas EJC y está orgulloso de su estilo personal y único que combina un alto nivel de habilidad en malabares con vídeo, música y narrativa. Su blog incluye contenido sobre todas las disciplinas que desarrolla: malabares, música y comedia, fotografía y ficción. |