Este artículo es una traducción del original en inglés de Thom Wall que puedes leer aquí.
Esto lo aprendí por primera vez en un taller del show “Button Wagon”, del malabarista Matt “Poki” McCorkle y el contorsionista Ember Bria.
Un “momento postal” es una foto estática donde pasa algo interesante y que se compone en una imagen plana en dos dimensiones. Si le hicieras una fotografía a ese momento concreto del espectáculo y se la enseñaras a un extraño por la calle, ¿les interesaría ver el resto del número?
Los carteles y las postales que capturaban estos “momentos» fueron la base del marketing de los shows de vodevil. La fuera de una única imagen estática no ha cambiando desde entonces y es una manera excelente de que tu número entre en las mente de tu público y permanezca. Aquí tenéis algunos ejemplos de pósteres de vodevil que capturaban la imaginación de los viandantes. Todos son grandes ejemplos de una sola imagen que cautiva al espectador. ¿Qué las hace tan atractivas? ¿Cómo puedes crear estos momentos en tu trabajo?
Hay que tener en cuenta que cada uno de estos momentos de tu número es un ejercicio excelente. Esto te obliga a dejar de pensar en la técnica y la coreografía y empezar a pensar en las imágenes que se mostrarán sobre el escenario. ¿Qué hace que las imágenes de abajo sean interesantes de mirar?
Es importante tener momentos reconocibles como éstos, especialmente en las variedades. Muchos malabaristas se quedan fijos en el “cerebro del malabarista” y diseñan números que confían solo en trucos técnicamente complejos, pero que son difíciles de entender para la gente normal cuando los ve. La mayoría de los trucos de “cerebro de malabarista” son interesantes para otros malabaristas porque son difíciles o porque tienen variaciones sutiles que pasan desapercibidas para las audiencias de no malabaristas (¿Te fijaste en el segundo 4 que el patrón 8448641 lo lanzó por detrás de la espalda? ¿No fue una pasada?).
Una buena prueba sería hacerle una foto a ese momento en el escenario: ¿verías al malabarista con un montón de objetos por encima de su cabeza, o encontrarías algo que cuente una historia más interesante? Si le hicieras una foto a la composición de los objetos sobre el escenario, ¿sería atractiva? Encontrar la manera de poner un malabarista de manera interesante en el centro de escenario, con atención a la presencia físicas y las imágenes que se generan con los malabares, en lugar de confiar solo en el tirón del truco, es lo que separa un buen número de malabares de una buena pieza artística.
¿Cómo uso este método?
Yo utilizo el método de la postal como el primer paso cuando escribo un nuevo número. Cuando estoy practicando la rutina intento buscar imágenes que puedan ser llamativas. Estas imágenes incluyen:
Voy documentando estos momentos potenciales en un bloc de notas. Al dibujar estos momentos me obligo a mí mismo a tener en cuenta la imagen fija del escenario en lugar de centrarme solo en la técnica necesaria para lograr el truco. Cuando tengo un puñado de estos momentos, empiezo a trabajarlos en el estudio.
Para terminar, aquí tenéis algunos ejemplos de mi cuaderno:
Espero que este método os sea de utilidad.
 | Thom Wall es un malabarista, pero también un artista de vodevil, un animador, un orador y un comediante. Vive en Estados Unidos, pero ha recorrido el mundo con sus números. Thom ha actuado con el Circo del Sol y ha recibido más de 20 premios nacionales e internacionales por sus actuaciones. Es un habitual de la lista de los 40 mejores malabaristas del mundo. Últimamente ha estado trabajando en el Circo del Sol como malabarista en solitario en el espectáculo «Totem» de gira por Japón, Estados Unidos, Canadá y Nueva Zelanda. |
